Ecuador es el primer país a nivel mundial que reconoce a todos los animales como sujetos de derechos
En 2022, la Corte Constitucional de Ecuador sentó un importante precedente al reconocer a los animales no humanos como sujetos de derechos, lo que incluye a las gallinas. Al contar con un sistema nervioso centralizado, las gallinas pueden experimentar dolor, sufrimiento y placer, lo que les otorga una capacidad sensorial similar a la de otros animales sintientes. Este reconocimiento establece que su bienestar debe ser una prioridad en cualquier sistema de manejo, evitando el sufrimiento en ambientes de hacinamiento intensivo.
El caso de la mona chorongo Estrellita, que vivió 18 años con una familia y fue posteriormente confiscada y llevada a un zoológico donde falleció un mes después, fue el detonante de este cambio judicial. La Corte falló a favor de reconocer que los animales tienen derecho a una vida libre de crueldad y a ser tratados con dignidad, creando un precedente que aboga por el respeto de sus derechos fundamentales.
Este reconocimiento es crucial para mejorar las condiciones de vida de las gallinas, en especial en sistemas de producción intensiva. La legislación vigente debe garantizar que estos animales no sean sometidos a condiciones que les provoquen dolor o sufrimiento innecesario, asegurando que sus derechos como seres sintientes sean protegidos y respetados en todo momento, incluso al momento de su faenamiento.
Como lo señala la Corte Constitucional: “El ser humano no debe ser el único sujeto de derechos, ni el centro de la protección ambiental.” Este principio refuerza la necesidad de un enfoque más amplio en el que todas las especies, incluidas las gallinas, sean tratadas con el respeto y la dignidad que merecen como seres vivos.